Botella de muestra estéril de 25 ml de fondo plano se construye a partir de polipropileno de alta calidad de grado médico, conocido por su resistencia química, inercia biológica y estabilidad térmica. El uso de dicho material avanzado no solo garantiza la compatibilidad con una amplia gama de tipos de muestras, como orina, esputo u otras muestras de fluidos, sino que también no garantiza interferencia con resultados analíticos, incluso durante el almacenamiento prolongado. Su construcción está libre de metales pesados y otros aditivos que podrían comprometer la integridad de la muestra, por lo que es una opción ideal tanto para pruebas de rutina como para análisis de alta precisión.
Una de las características distintivas de esta botella es su diseño superficial y estructural. Si bien la tapa parece suave al tacto, integra granos finos tanto en la superficie como en su costado. Esta textura reflexiva proporciona un agarre mejorado durante la apertura y el cierre, incluso cuando los guantes se usan o las manos están húmedas, reduciendo el riesgo de contaminación y asegurando el sellado seguro. El diseño de la tapa mejora aún más su rendimiento a prueba de fugas, que es esencial para el transporte y el manejo seguros de muestras biológicas en escenarios para pacientes hospitalizados y ambulatorios.
El cuerpo de la botella adopta una forma limpia y simplificada sin marcas de gradación. Este enfoque minimalista evita las distracciones visuales durante el etiquetado y la observación de la muestra, y ofrece más espacio en la superficie para etiquetas de código de barras o escritura a mano, asegurando claridad en el seguimiento de muestras. La ausencia de graduaciones es deliberada, lo que refleja una filosofía de diseño que prioriza la precisión en el control de volumen en el punto de recolección, en lugar de una estimación visual aproximada.
En la base, la botella presenta un fondo plano, que agrega una capa de estabilidad crucial para varios contextos operativos, desde pararse en posición vertical en bancos de laboratorio hasta sistemas de clasificación de muestras automatizadas. La base plana también minimiza el riesgo de propinas, derrames o muestras de contaminación cruzada, mejorando tanto la confianza del usuario como la seguridad de la muestra.
Con una capacidad definida de 25 ml, la botella satisface las necesidades de la mayoría de las colecciones de muestras de rutina, ofreciendo un amplio volumen para múltiples procedimientos de prueba mientras evita los desechos excesivos de muestra. El tamaño está optimizado para la eficiencia de almacenamiento, lo que permite la disposición compacta en refrigeradores, titulares de centrífuga y casos de transporte, mejorando así la organización del flujo de trabajo.
La esterilidad es otra fuerza fundamental de esta botella. Cada unidad se somete a un riguroso proceso de esterilización para garantizar que llegue listo para usar, reduciendo el tiempo de preparación en laboratorios ocupados y minimizando el riesgo de contaminación externa. Ya sea que se use en hospitales, clínicas o laboratorios de diagnóstico de terceros, su empaque estéril respalda procedimientos asépticos estrictos.